Creación


Este texto, entre trascendental y poético, lo escribí por el día de Sant Jordi del año 2010 (Día Internacional del libro y fiesta del libro y de la rosa en Cataluña), un día que tengo en gran estima. En aquel momento, al buscar un tema sobre el que escribir, me di cuenta que una buena idea podía ser hacer protagonistas del relato a las propias letras y las palabras y este es el resultado. De paso se lo dedico a la gente que conozco que está estudiando duramente para obtener el nivel C de Lengua Catalana (¡ánimo!). A veces parece que todas las lenguas son hermosas hasta que te obligan a estudiarlas con la frialdad de un cirujano, pero con el tiempo te das cuenta de que ese conocimiento profundo te ayuda a apreciarlas aún más en su complejidad. Que lo disfrutéis.



CREACIÓN, por Carlos Sanmartín

Yo creo. No creo de creer, sino que creo-creo. Creo de crear.

Creo letras. No existen hasta el momento que las pongo. Y ahí están. Lo decido y se materializan. Me imagino que si tuvieran conciencia podrían pensar al aparecer: "¿Dónde  estoy?, ¿qué hago aquí?, ¿qué soy? ". Eres un fonema, no tienes sentido por ti mismo, le diría a una de ellas. No eres sino la representación de algo que está mucho más allá de ti, un sonido, un símbolo. Sólo el que te creó te sabe interpretar.

Yo sé cuál es tu finalidad, aunque tú no seas capaz de comprenderlo, porque tengo la visión completa de tu mundo. Reúnete con tus compañeras letras, formad una unidad con significado. Corre, ve con ellas. Y aún así, cuando formeis una unidad seguireis sin estar completas, porque formáis parte de algo aún más grande. Cuando os unís formais palabras, luego frases y éstas crean mundos, así que no soy más que un creador de mundos en el que habitais vosotras, mis amadas criaturas. A veces, me traicionais, a veces no salís como yo quería y otras os tengo que sacrificar, pero os amo de todos modos. Siempre.

Nunca comprendereis la magnitud de la obra que formais juntas, ni podreis ver que aunque alguna de vosotras no siempre se guste como es, todas resultáis imprescindibles para formar parte de un conjunto de infinita belleza y perfección del que me sentiré orgulloso. En la mayoría de casos, aprovechad el tiempo que os toque de efímera vida. Sin embargo, en ocasiones, en muy raras ocasiones, ese conjunto se vuelve más trascendente que vosotras mismas e incluso que vuestro creador. Entonces podreis vivir por toda la Eternidad.


Barcelona, 23 de abril de 2010

Comentarios

Entradas populares de este blog

El último rugido

Draconis Memoriae (Memòries de Drac)